(Bloomberg) — Los importadores chinos de carbón están buscando reducir los envíos después de que perdieron dinero en el comercio este año.
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Los compradores están hablando con mineros extranjeros con miras a reservar menos cargamentos en contratos a largo plazo a partir de 2025, según la Asociación de Distribución y Transporte de Carbón de China. Los compradores sufrieron pérdidas con las importaciones de carbón térmico, utilizado en centrales eléctricas, de sus mayores proveedores en Indonesia, Rusia y Australia, y de lugares tan lejanos como Colombia, dijo el principal organismo comercial de China en una sesión informativa el miércoles.
La producción nacional y las importaciones récord han creado un exceso de carbón en China que está resultando difícil de revertir debido a la débil economía. Los precios apenas se han movido durante meses, a pesar de la presión de la demanda máxima de aire acondicionado durante el verano y la necesidad de abastecerse de combustible para calefacción en invierno. Las incertidumbres económicas generadas por unas elecciones estadounidenses reñidas, incluida la amenaza de enfrentamientos comerciales con una administración entrante de Trump, también están poniendo los nervios de punta entre los importadores.
“No vemos muchas mejoras fundamentales para respaldar el aumento de los precios el próximo año”, dijo el analista de CCTD Li Xuegang.
Sin embargo, la asociación reconoció riesgos al alza para su visión bajista, incluido el impacto de los recientes esfuerzos de Beijing para reactivar la economía.
El clima también es un comodín, y los frentes fríos provocados por La Niña podrían elevar los precios en el corto plazo a 900 yuanes (126 dólares) la tonelada, desde su valor actual de alrededor de 850 yuanes. El tiempo que permanezcan en ese nivel dependerá de la duración de cualquier ola de frío, dijo Li.
También vale la pena observar la energía hidroeléctrica a medida que el clima se vuelve más volátil. La producción del principal sustituto del carbón se desplomó en septiembre, después de que las fuertes lluvias del verano ayudaron a los generadores a extender el crecimiento de la producción a 11 meses consecutivos.
Y aunque las reservas de carbón de China son abundantes, el inventario mantenido en las centrales eléctricas costeras todavía está por debajo de los máximos observados en noviembre pasado, según datos del CCTD. Eso sugiere que las empresas de servicios públicos querrán reponer sus existencias, aunque el mal tiempo podría obstaculizar el esfuerzo.
“Es probable que las provincias mineras sin litoral reduzcan el envío de carbón a otras regiones para priorizar las necesidades locales”, dijo Li.
Otros observadores esperan que las importaciones de China se moderen en 2025. La consultora china Fenwei Energy Information Service Co. prevé una caída interanual del 4% hasta los 490 millones de toneladas, según la analista Amy Xu.