El ex candidato de Trump para unirse a la Reserva Federal ha propuesto una posibilidad radical para resolver la inflación.


Millones de estadounidenses se sienten frustrados porque sus dólares no están llegando tan remotamente como ayer en el supermercado, en el arrendamiento o en el seguro del automóvil.

Judy Shelton, una economista controvertida que ha sido presentada como una posible votación por el expresidente Donald Trump para liderar la Reserva Federal si apetito las elecciones presidenciales de noviembre, ha propuesto una posibilidad radical: la Reserva Federal debería aspirar a no tener inflación alguna.

Actualmente, la Reserva Federal apunta a una tasa de inflación estable, donde los precios aumentan a un ritmo flemático pero constante de sólo el 2%. Se supone que esto sucede tan gradualmente que la gentío casi nada lo nota.

Un objetivo de inflación del cero por ciento podría ser popular, pero representaría un cambio imprevisto, que los principales economistas advierten que sería contraproducente.

“La inflación estable es un oxidado porque significa que no es estable”, dijo Shelton a CNN en una entrevista nuevo.

Shelton, a quien Trump nominó sin éxito para la Grupo de la Reserva Federal en 2020, ha argumentado durante mucho tiempo que un objetivo de inflación cero ayudaría a los estadounidenses comunes y corrientes que se ven perjudicados cuando sus cheques de cuota no logran mantenerse al día con los precios.

“¿Por qué no demorar hasta el final y reducirlo a cero y hacer la vida mucho menos complicada para todos los que tenemos que usar el dólar y expresar constantemente las cosas en términos de inflación ajustada?” dijo Shelton, autor de un nuevo obra sobre el pasta titulado “Good as Gold”.

Sin incautación, los economistas tradicionales y los observadores de la Reserva Federal advierten que un objetivo de inflación cero en la Reserva Federal sería peligroso.

“Creo que es una mala idea. Es un error”, dijo a CNN Mark Zandi, economista caudillo de Moody's Analytics.

La longevo preocupación expresada por Zandi y otros es que la inflación cero está incómodamente cerca de la deflación, el entorno de caída de precios que asusta tanto a economistas como a banqueros centrales.

“La deflación fue una característica definitoria de la Gran Depresión”, dijo Zandi, señalando que la caída de los precios hizo casi increíble que las empresas y los consumidores pagaran sus deudas. “Si la historia sirve de tutor, no conviene seguir ese camino. Nunca ha funcionado correctamente”.

Aunque la deflación puede parecer sorprendente para los consumidores (¿a quién no le gustan los descuentos?), en la experiencia la caída de los precios hace que la gentío retrase la negocio de cosas.

Posteriormente de todo, ¿por qué comprar $300 en una parrilla hoy si cree que será más baratura en unas semanas? Y esos retrasos pueden imponer a que los precios caigan aún más, provocando aún más retrasos. Enjuague y repita.

“La deflación puede convertirse en una helicoidal sin fin, porque no hay forma de que la política monetaria la contrarreste”, dijo Justin Wolfers, economista de la Universidad de Michigan que respaldó a la vicepresidenta Kamala Harris.

De hecho, una de las razones por las que la Reserva Federal fijó su objetivo de inflación en el 2% es porque está alejada de esa zona de peligro de deflación.



Source link

Leave a Comment