Deshacerse del enchufe
Durante el evento “Nosotros, Robot” de la compañía anoche, el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, mostró lo que parecía ser un prototipo inicial de un “Cybercab”.
Aún a varios años de entrar en producción, el vehículo supuestamente costará 30.000 dólares y podrá generar dinero para sus propietarios, algo así como tener un Airbnb.
Por supuesto, dado el deplorable historial de Musk cuando se trata de hacer grandes promesas, debemos tomar su presentación del robotaxi con un grano de sal, algo que los inversores aparentemente se han tomado en serio.
Sin embargo, destacó una característica propuesta para el biplaza futurista. Según Musk, el vehículo no tendrá enchufe de carga y dependerá de bobinas de carga inalámbricas integradas en las carreteras.
Eso lo alejaría aún más de un vehículo de pasajeros convencional, lo que plantearía aún más preguntas sobre cuándo, si es que alguna vez, podrá salir a la carretera.
Razonamiento inductivo
Musk se mantuvo extremadamente vago durante el llamativo evento y una gran cantidad de preguntas siguen sin respuesta.
Por un lado, no sabemos exactamente cómo se cargará el automóvil de forma inalámbrica, y mucho menos a qué velocidad.
“Algo que también estamos haciendo, y ya es hora de que lo hagamos, es la carga inductiva”, dijo durante el evento. “Entonces, el robotaxi no tiene enchufe. Simplemente pasa por encima del cargador inductivo y se carga. Así que, sí, así es como debería ser”.
Para ser justos, ya nos hemos encontrado con prototipos iniciales de carreteras que pueden cargar vehículos o autobuses de forma inalámbrica. Pero a pesar del gran interés de los gobiernos locales, el concepto parece bastante lejos de convertirse en realidad.
En lugar de construir carreteras enteras con cargadores, es probable que Tesla busque incorporar cargadores individuales en ciertos puntos.
La industria automovilística ya ha avanzado considerablemente en el desarrollo de este tipo de cargadores. A principios de este año, el Laboratorio Nacional Oak Ridge (ORNL) del Departamento de Energía estableció un nuevo récord, cargando un Porsche Taycan a una tasa máxima de transferencia de energía de 270 kilovatios.
Sin embargo, la tecnología de carga inalámbrica en su estado actual sigue siendo bastante lenta y probablemente aún faltan muchos años para encontrar una solución pública.
Queda por ver si Tesla podrá encontrar una solución lo suficientemente conveniente y eficiente a tiempo para el lanzamiento de su tan esperado Cybercab.
Además, la compañía ya tiene muchos otros obstáculos regulatorios que superar, especialmente cuando se trata de un automóvil que no tiene volante ni pedales y se conduce solo en la vía pública.
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